Alex Iturregui, functional medicine health coach




INTOLERANCIA A LA HISTAMINA




¿QUÉ ES LA HISTAMINA?


La histamina es un compuesto químico producido y utilizado en todas partes de nuestro cuerpo. Se almacena principalmente en basófilos y mastocitos. La histamina desempeña tres funciones fundamentales, entre otras: en el estómago ayuda a la producción de ácido gástrico, lo cual ayuda a degradar y digerir los alimentos de forma eficaz; como neurotransmisor, comunica mensajes importantes entre neuronas del sistema nervioso; y como mecanismo de respuesta inflamatoria es liberada de los mastocitos entre otros compuestos para neutralizar los organismos dañinos, incluidos alérgenos, virus y bacterias.

También consumimos histamina de alimentos y bebidas y algunas de nuestras bacterias intestinales producen histamina.



¿CÓMO DEGRADAMOS LA HISTAMINA?


El exceso de histamina se degrada mediante dos enzimas: la diaminooxidasa (DAO) en el tracto digestivo y la histamina n-metiltransferasa (HNMT) en el sistema nervioso central y en las células de diversos tejidos de todo el cuerpo.


¿QUÉ CAUSA LA INTOLERANCIA A LA HISTAMINA?


La intolerancia a la histamina ocurre cuando hay niveles excesivos de histamina en el cuerpo debido a una deficiencia en la producción de DAO y HNMT, las dos enzimas que degradan la histamina. Además de estas deficiencias enzimáticas, otras afecciones médicas pueden aumentar los niveles de histamina en el cuerpo, como SAM (síndrome de activación mastocitaria), alergias, sensibilidad alimentaria, síndrome del intestino permeable (exceso de permeabilidad intestinal), SIBO y predisposición genética. La exposición a toxinas y alérgenos ambientales, moho, contaminación, compuestos orgánicos volátiles (COV) de ambientadores o pinturas y cualquier producto perfumado empeora la intolerancia a la histamina, ya que pueden desencadenar la liberación de histamina de las células de almacenamiento como los mastocitos. El estrés también puede provocar la liberacinón de histamina en el cuerpo. El consumo de alimentos y bebidas naturalmente ricos en histamina, como vino, alimentos fermentados, quesos añejos y restos de comida, puede contribuir a niveles elevados de histamina en personas con intolerancia a la histamina.

La intolerancia a la histamina se puede observar junto con el síndrome de activación mastocitaria porque cuando los mastocitos se activan, pueden liberar histamina. La activación constante de los mastocitos puede provocar un flujo constante de histamina en el cuerpo. Si el cuerpo no puede seguir eliminando esta histamina, puedes terminar con intolerancia a la histamina.


FACTORES QUE CONTRIBUYEN A LOS NIVELES ALTOS DE HISTAMINA


     • Alergias (reacciones IgE)/Sensibilidades alimentarias y ambientales

     • Deficiencias de DAO y HNMT (polimorfismos genéticos)

     • Alimentos ricos en histamina

     • Síndrome del intestino permeable (exceso de permeabilidad intestinal)

     • Síndrome de activación mastocitaria (SAM)

     • SIBO (crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado)



SÍNTOMAS COMUNES DE INTOLERANCIA A LA HISTAMINA


Al producirse una acumulación de histamina en el cuerpo, se activan determinados receptores que se encuentran en todo el organismo, los síntomas varían según qué receptores se activan y en qué tejidos, trayendo síntomas muy diversos e incómodos que van desde leves hasta muy perturbadores. El centro de todos los síntomas de la intolerancia a la histamina es la inflamación. Los síntomas de niveles altos de histamina o intolerancia a la histamina pueden incluir:



     • Acné

     • Alergias Estacionales

     • Ansiedad

     • Cambios de Humor

     • Ciclos Menstruales Irregulares

     • Congestión Nasal

     • Dolor Abdominal

     • Dolores de Cabeza/Migraña

     • Eczema

     • Enrojecimiento

     • Erupciones

     • Estornudos, Secreción Nasal

     • Estreñimiento o Diarrea

     • Fatiga

     • Hinchazón

     • Hipertensión

     • Mareos o Vértigo                

     • Náuseas

     • Niebla del Cerebro          

     • Palpitaciones del Corazón

     • Picazón en los Ojos, Lagrimeo

     • Presión Arterial Baja

     • Reflujo Ácido

     • Rosácea

     • Urticaria

     • Sensaciones de Hormigueo en la Piel

     • Síndrome Premenstrual

     • Síntomas de Asma     

     • Tinnitus (zumbido en los oídos)          

     • Trastornos del Sueño